16 de febrero de 2012

Malos momentos en los que dejo de ser tu niña
para convertirme en el diablo que viste de Zara.
Malos momentos en los que mi actitudes se vuelven incorrectas,
en los que no te sirve nada de lo que te doy.
Malos momentos, días grises
en los que nada está bien,
en los que siempre elijo la caja dónde está la serpiente.
Y bien podría hacerme con ella unos tacones,
pero al no servirte nada de lo que hay en mi
mi mayor aventura es sentarme en el sofá y recordarte a mi lado.

Dosis de miedo
en los días que no te tengo,
en los días en los que no te valgo,
en los días en los que sin ti me pierdo.

Dosis de miedo al pensar que
no soy lo que buscabas,
que no soy lo que esperabas,
que no soy lo que necesitabas.
Y que sólo la casualidad
hizo que me encontraras.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

MIEDO.....no hay miedo para los valientes, dejame acompañarte, SIEMPRE dos mejor que uno, cojidos de la mano para no caerse.
. , @ ? =

Anónimo dijo...

Lagrima tras lagrima
Mis ojos esperanzados no se quedaran secos.
Lagrimas y mas lagrimas por un querer hasta doler.....